La primera vez de Boca Juniors ante The Strongest

El en Derribador histórico
La primera vez de Boca Juniors ante The Strongest

"La foto desgastada, pero histórica, el equipo de The Strongest que jugó esa tarde en el Siles ante Boca. (Foto: Archivo)"

(Por Marcelo De la Cruz). -   The Strongest fue a la Libertadores de 1965 como campeón boliviano, en el grupo tenía al Deportivo Quito y al argentino Boca Juniors. El partido jugado en la ciudad de La Paz fue memorable nos solo por la tradición que tenían los dos clubes, sino porque fue de los mejores espectáculos que se vieron en el viejo Siles. 

El partido se jugaba el 14 de febrero de ese año en la ciudad de La Paz, el Tigre venía de la resonante victoria conseguida en Quito ante el Deportivo por uno a cero, primera victoria de un equipo nacional como visitante en el Torneo Sudamericano. Ese día el equipo jugó con Solíz; Cainzo, Di Lorenzo, Ramirez, Dueñas, Torrez, Quevedo, Vargas, Morales, Bonano y Aguirre. El día del juego fue domingo y el estadio estuvo abarrotado para ver a los argentinos que llegaban a la sede de gobierno.

Quevedo y Morales anotaron para los atigrados, 2 a 0 y parecía una victoria asegurada. Pero llegó la segunda fracción, a los pocos minutos de juego fue expulsado Cainzo por infracción cometida al argentino “Gonzalito”. Declinó el avance gualdinegro y llegó la primera conquista boquense por medio de Silveira, posteriormente se cobró un penal (muchos que aún lo recuerdan, dicen que no fue) en contra de los locales por la infracción de Tórrez. La cuenta fue igualada por Silveira y posteriormente cuando se jugaban los últimos minutos Menéndez aumento la cuenta y puso cifras definitivas: 3 a 2 a favor de Boca Juniors.

En la cabeza del hincha quedó el gran trabajo de los locales en el primer tiempo, pero también quedo la bronca del penal cobrado injustamente y causante del descontrol en filas atigradas. 

Roberto Cainzo, jugador del Tigre de ese domingo, declaró acerca del partido hace algunos años: “fue una expulsión injusta, fue la primera vez que me sacaron tarjeta roja en toda mi carrera. Se decía que Gonzalito, quién provocó mi expulsión, tenía instrucciones de Pedernera para hacer que yo salga del campo de juego y de esta manera aprovechar por ese lado del campo de juego a los argentinos, cosa que no ocurrió al final”.

Max Ramírez también declaró acerca de ese partido en vida: “El estadio estaba abarrotado de gente, no cabía nadie allí en las gradas. Ganábamos por dos a cero y se dio vuelta la torta para beneficio de los de Boca. Ese 1965 el club estaba dirigido por uno de los más caracterizados y dinámicos dirigentes, Don Antonio Asbún, ese hombre con el tesón que lo caracterizó siempre se propuso comprar la sede que hoy tiene el club en la Colón, y en ese afán conversó con el plantel de jugadores, nos hizo ver las intenciones que tenía y entonces todos aceptamos no cobrar ni premios ni viáticos. Todo lo recaudado en esa Copa sirvió para comprar la casona donde hoy se edificó la sede del club que es patrimonio del cual debemos enorgullecernos. Mucha gente no sabe de esta historia y es bueno que lo sepan los atigrados, esto tiene un valor imperecedero y digno”.

El Chino contó también acerca de ese cotejo: “Cuando el equipo ingresó al gramado del Siles la gente comenzó a corear Strongest y fue una fiesta inolvidable la que se vivió esa tarde. Salimos con la derrota en nuestras espaldas, pero con mucha dignidad porque se perdió guapeando y dejando todo en la cancha”, finalizó.